La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) emitió este jueves un comunicado muy duro pidiendo a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) “sanciones ejemplares” tanto para Independiente de Argentina como para Universidad de Chile por los graves incidentes que se dieron en el encuentro de vuelta por los octavos de final de la Copa Sudamericana el miércoles a la noche en Avellaneda. No obstante, horas más tarde, sorprendió al rectificar sus opiniones en otro comunicado.
En ese primer comunicado, la CBF, repudió los hechos e instó a que "los aficionados, deportistas o profesionales del espectáculo deportivo deben ir a presenciar un partido sin temer por su integridad física al ejercer su derecho a participar o presenciar un partido de fútbol”.
A su vez, exigió una resolución ejemplar con los responsables: "La CBF reafirma su compromiso con la promoción de un fútbol seguro, inclusivo y pacífico. Solo con sanciones ejemplares y acciones concretas será posible erradicar la violencia en los estadios y preservar la dignidad del deporte en nuestro continente".
La situación insólita que se dio por la tarde
En la tarde del mismo jueves, la CBF salió a aclarar que su presidente, Samir Xaud, no había autorizado el comunicado matutino.
"La nota publicada esta mañana fue divulgada sin la anuencia del presidente de la entidad, quien ya estaba en diálogo directo con la Conmebol y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) sobre el incidente", explicó.
Asimismo, también lamentó los hechos violentos y aclaró que la relación "con la AFA siempre ha estado guiada por el respeto, la admiración mutua y un compromiso compartido con el fortalecimiento del fútbol en nuestra región”.
Por otra parte, sostuvo el compromiso que tiene con la Conmebol para "erradicar la violencia en el fútbol, así como cualquier forma de discriminación en los estadios, uno de los pilares de la actual gestión".
"Episodios de violencia como estos ocurren en otras partes del continente, incluido Brasil", aceptó el segundo comunicado tras las críticas que recibió la CBF por el primero que borró de las redes.
Cabe acotar que la propia entidad mayor del fútbol brasileño quedó bajo la lupa en las últimas temporadas por el trato a los visitantes que viajan al país. Ha pasado reiteradamente con hinchas de varios clubes, entre ellos, Nacional, Peñarol, varios clubes argentinos. El último ejemplo fue el de la hinchada de Godoy Cruz, cuando viajó a Belo Horizonte la semana pasada para ver el partido contra Atlético Mineiro por Copa Sudamericana.