Aguas Corrientes, la única planta que tiene OSE para potabilizar el agua del área metropolitana

Nacional > reservas

¿Arazatí o Casupá? Ventajas y desventajas de las obras que analizó OSE para mejorar abastecimiento de agua potable

Ambas obras presentan algunas desventajas e incluso hay quienes entienden que las dos son necesarias
Tiempo de lectura: -'
15 de mayo de 2023 a las 05:02

La sequía que atraviesa Uruguay, la más importante del último siglo según Inumet, generó una situación –mil veces advertida– que llevó a que el agua que sale de las canillas del área metropolitana tenga un gusto a sal inusual y que a ciertos grupos de la población se les recomiende evitarla.

Ninguna obra revertiría esto inmediatamente, por el plazo que lleva construir este tipo de infraestructura, pero a esta altura, con informes que desde 1970 advierten por estos problemasnadie discute que es necesario realizar algún tipo de inversión para mejorar el sistema de agua potable que tiene Uruguay y particularmente el que abastece a Montevideo y Canelones. La discusión, que siempre aparece en esta penillanura levemente ondulada, es cuál es la obra más necesaria y eficiente.

OSE tiene sobre la mesa dos proyectos con el objetivo de mejorar la infraestructura actual. Uno de ellos, priorizado por este gobierno, es el proyecto Neptuno (en Arazatí, San José). Una obra que permitirá tomar agua (más salada) del Río de la Plata, una fuente distinta a la que se usa actualmente y que desarrollará nueva infraestructura para procesarla.

Para priorizar esa obra, OSE descartó, o al menos puso en pausa, otra que había sido impulsada por el gobierno anterior y para la cual ya se habían realizado diversos estudios técnicos e incluso se había logrado que, en diciembre de 2019, la CAF autorizara un préstamo para su financiamiento. Se trata de la represa en Casupá (Florida), un embalse aguas arriba del Santa Lucía para tener más agua dulce disponible para la estación de Aguas Corrientes. Es decir, más agua pero de la misma fuente y con la misma infraestructura para procesarla.

Sin embargo, ambas obras presentan ventajas y desventajas e, incluso, algunas voces entienden que las dos son necesarias.

Casupá

Es el proyecto que lleva más tiempo en el radar del gobierno uruguayo. Las administraciones frenteamplistas lo anunciaron en 2013 y 2016 pero nunca lo concretaron. Desde el último anuncio sí avanzaron en diversos estudios técnicos y lograron que la Comisión Andina de Fomento (CAF) autorizara un préstamo de US$ 80 millones para llevar adelante la obra.

En la transición, el Poder Ejecutivo saliente le entregó una carpeta al entrante que contenía los avances en este tema. Hasta, por lo menos, mediados de 2020, el presidente de OSE, Raúl Montero, estaba convencido de avanzar en este sentido. “Tenemos la obligación de pensar en Casupá porque la falta de reserva de agua es preocupante”, le dijo a La Mañana en julio de ese año.

La cuenca del arroyo Santa Lucía es superavitaria. En tres o cuatro días de lluvias puede pasar el agua que precisa Montevideo para todo el año. Pero así como pasa, sigue hacia el Río de la Plata y se pierde, si se piensa en los términos de agua para potabilizar. Y después vienen las épocas de sequía y es ahí cuando se siente esa pérdida. 

Casupá vendría a solucionar ese problema. Es un embalse que permitiría “guardar” más agua en épocas de excedente y llevarla a Aguas Corrientes, la planta potabilizadora, cuando sea necesario. Pero esto también presenta algunos inconvenientes. 

“Es la misma cuenca, una sequía puede afectar a toda la cuenca y puede ser que después de dos o tres años de seca, que no es algo raro, los dos embalses estén sufriendo el mismo déficit. Y por lo tanto no está mal ir hacia otra cuenca”, explicó Montero en octubre de 2022 en una entrevista en Desayunos Informales.

Y además de ser la misma cuenca, también es la misma planta. Es decir, la cantidad de agua que se puede potabilizar es la misma que ahora y en caso de algún problema en Aguas Corrientes, no habría fuente alternativa.

Actualmente, la zona metropolitana es abastecida solamente con Aguas Corrientes, una planta que trabaja las 24 horas del día, los siete días de la semana, produciendo en promedio 600 mil metros cúbicos diarios. 

Es un milagro que tengan agua todos los días”, fue la advertencia de Diego Berger, un especialista argentino-israelí invitado por OSE en el marco de un convenio con la compañía nacional de aguas de Israel que dijo que Uruguay sí o sí tiene que pasar a tener dos fuentes de abastecimiento de agua.  

Al mismo tiempo, Casupá podría no ser necesario, entiende Montero, si OSE lograra reducir la cantidad de pérdidas que tiene su infraestructura. Diversos estimaciones plantean que hasta el 50% del agua que se potabiliza se pierde por problemas en los caños de la empresa pública o al menos no se factura. 

Arazatí

Es el proyecto por el que optó la administración del presidente Luis Lacalle Pou. Una obra tres veces más cara que la de Casupá pero que generará nueva infraestructura para potabilizar el agua y que tendrá como fuente el Río de la Plata que, para los usos que precisa el área metropolitana, es infinita.

¿Qué cambió en la visión de Montero para preferir Arazatí por sobre Neptuno? “Empecé a ver que el problema no es solo cantidad de agua. Estábamos enfocando mal el tema. Casupá solo me da agua. Tengo la misma capacidad de producción, porque Aguas corrientes es la misma”, dijo en la mencionada entrevista donde recordó episodios donde parte de Montevideo se quedó sin agua por un fallo en una tubería. 

Neptuno es un proyecto que nace en octubre de 2020 por parte del sector privado, cuando cuatro empresas (Saceem, Berkes, Ciemsa y Fast) presentaron en Presidencia –bajo un consorcio denominado “Aguas de Montevideo”– el proyecto para construir la toma de agua y la planta potabilizadora en Arazatí (San José).

Tiene un costo de cerca de US$ 260 millones pero la inversión y el riesgo corren por parte del privado (algo que es mejor visto en el equipo económico que tomar deuda) al que OSE, que se encargará de la operación, le pagará durante durante 18 años una cuota fija de alrededor de US$ 41 millones anuales. El consorcio que gane la licitación –Aguas de Montevideo tendrá 12% de ventaja– se encargará del diseño, la construcción, el financiamiento y el mantenimiento de la infraestructura.

La principal desventaja que tiene este proyecto es que si bien la mayoría del año el agua en Arazatí es dulce, se registran eventos de salinidad, lo que impide que se pueda tomar para potabilizar. 

Por eso, la obra incluye un pólder que tendrá reservas de agua bruta para utilizar en días en que la salinidad sea mayor a la permitida. Ese reservorio tendrá agua para 87 días, la misma cantidad de días de salinidad registrada en 2021, el año estudiado por OSE.

El problema se presentaría si la cantidad de días con eventos de salinidad superan los 87 días consecutivos y al mismo tiempo la cuenta del Santa Lucía sufre una sequía, algo que algunos expertos tienden a decir que son eventos que pueden  coincidir. Los 87 días de salinidad registrados en 2021 fueron durante el verano. 

Financiamiento

La forma de financiar la obra fue uno de los puntos claves para que el gobierno decidiera optar por Arazatí. Si bien CAF había autorizado un préstamos para avanzar con la represa de Casupá, el equipo económico liderado por Azucena Arbeleche e Isaac Alfie entendían que la opción de tomar deuda no era conveniente. 

Por eso convenció la idea de que un privado haga la inversión. Sin embargo, el costo de la obra, que OSE deberá pagar a lo largo de los años, también fue un tema de discusión entre Alfie y OSE. El 20 de abril, el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto envió una carta advirtiendo que su oficina no había autorizado los últimos cambios aprobados que elevaban en US$ 50 millones el costo del proyecto. Entre esos cambios estaba el aumento de capacidad del reservorio. 

De todos modos, esos cambios se implementaron y el reservorio de agua tendrá agua para 87 días. Sin embargo, los detractores de la obra de Neptuno, como el director por el Frente Amplio, Edgardo Ortuño, cuestionan que la infraestructura sea de un privado y señalan que, a largo plazo, la obra será mucho más cara para OSE.

Comentarios

Registrate gratis y seguí navegando.

¿Ya estás registrado? iniciá sesión aquí.

Pasá de informarte a formar tu opinión.

Suscribite desde US$ 345 / mes

Elegí tu plan

Estás por alcanzar el límite de notas.

Suscribite ahora a

Te quedan 3 notas gratuitas.

Accedé ilimitado desde US$ 345 / mes

Esta es tu última nota gratuita.

Se parte de desde US$ 345 / mes

Alcanzaste el límite de notas gratuitas.

Elegí tu plan y accedé sin límites.

Ver planes

Contenido exclusivo de

Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.

Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá

Cargando...