Alfonso Trezza y Martín Rodríguez no lo dudaron. Se miraron y salieron corriendo, a la máxima velocidad, desde el banco de suplentes del Parque Viera rumbo a la punta opuesta de la cancha donde se había generado el tumulto entre los jugadores de Wanderers y Nacional tras el festejo de gol de Diego Hernández, en el partido que jugaron el domingo de noche en el Parque Viera por la sexta fecha del Torneo Apertura
El “Torito” Diego Rodríguez también saltó desde el banco y se unió a la carrera de sus dos compañeros, que llegaron para sumarse a los futbolistas que estaban en cancha y a los que no le gustó nada la celebración del futbolista bohemio. Luego, aparecieron más suplentes.
Si bien nada ameritaba esa reacción, que en algunos casos llevó a intercambio de golpes, como el del volante Yonathan Rodríguez, que fue expulsado, y Diego Zabala, que vio la tarjeta amarilla por empujar a Hernández e iniciar los altercados, y por la que Fiscalía hará una citación de los futbolistas involucrados de ambos planteles, el hecho mostró cierto cambio de actitud en el plantel tricolor.
Tras el clásico de febrero que Peñarol ganó 1-0 en el Campeón del Siglo, uno de los cuestionamientos que le realizaron a los futbolistas tricolores fue en una jugada en la que reclamaron penal de Ramón Arias a Juan Ignacio “Colo” Ramírez.
El atacante de Nacional quedó tendido en el área de Peñarol, rodeado por jugadores rivales y solo su hermano Santiago, unos segundos después, fue a acompañarlo, mientras los zagueros carboneros le recriminaban que había exagerado.
A raíz de esa situación se planteó falta de liderazgo y de referentes, en un equipo renovado que ya no cuenta con figuras como Gonzalo Bergessio, Diego Polenta, Rafa García o Andrés D’Alessandro, que este año tiene como capitán al arquero Sergio Rochet y como segunda opción a Felipe Carballo.
¿Qué cambio? Según supo Referí, tras la derrota clásica uno de los puntos del que hablaron los jugadores en la Ciudad Deportiva Los Céspedes fue lo que había pasado con el Colo en aquella jugada en la que quedó solo y en el piso entre medio de camisetas aurinegras.
Explicaron que no se planteó una charla específica sobre ese tema, pero hicieron comentarios al respecto con una misma idea: eso no podía volver a suceder.
Los primeros cambios se vieron en el Viera, cuando los jugadores recordaron las charlas tras el clásico y reaccionaron en bloque cuando el partido tuvo su pico de tensión.
Tras los incidentes y la vuelta a la calma, el partido continuó y en los minutos finales Nacional empató 2-2, logrando un punto en el Prado, mostró una mejora en el juego y un cambio de actitud.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá