El uruguayo Federico Valverde tiene desde este miércoles un nuevo compañero en Real Madrid.
Se trata del francés Eduardo Camavinga, un volante francés de apenas 18 años.
Nació en un campo de refugiados en Angola el 10 de noviembre de 2002 y casi 19 años después jugará en el club más laureado de la historia del fútbol.
Su numerosa familia huyó de las guerras en la República Democrática del Congo para refugiarse en Cabinda, que en realidad pertenece a Angola, pero está dentro del propio Congo.
Nació en un campo de refugiados y tiene cinco hermanos y una hermana.
Siendo aún un bebé de pocos meses, su familia emigró a Francia.
"Vinimos (a Francia) para huir de la guerra. Tuvimos que batallar mucho; el fútbol fue mi forma de evadirme", dijo el volante en una entrevista realizada hace algunos años.
Vivía en la pequeña ciudad de Fougeres y con el tiempo, lo fichó Rennes.
Con solo 16 años y cinco meses debutó en Primera división en la Ligue 1.
La única vez que enfrentó a Paris Sainjt-Germain y a Edinson Cavani, fue el 3 de agosto de 2019 por la Supercopa de Francia que ganaron los parisinos 2-1.
Tras haberse nacionalizado francés, el 8 de setiembre de 2020, debutó en la selección gala, en el triunfo francés ante Croacia (4-2), por a la Liga de las Naciones.
En su segundo partido el 7 de octubre del año pasado, fue titular y marcó su primer gol, un igolazo que abrió el tanteador en un amistoso contra Ucrania que terminó 7-1.
Su gran desempeño en Rennes en su selección llevó a que lo contratara Real Madrid y este miércoles hizo oficial su fichaje.