La selección de Uruguay cayó vapuleada 5-1 el martes contra Estados Unidos, en amistoso disputado en Tampa, generando todo un revuelo en el ámbito de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y también en el entorno de la selección.
El entrenador Marcelo Bielsa volvió a asumir las culpas y la responsabilidad por lo sucedido. Es un discurso que se viene repitiendo en varias conferencias de prensa. Pero lo que no aparecen en cancha son soluciones para que el equipo levante su nivel.
El entrenador quedó en una situación límite porque el ejecutivo de la AUF, comandado por Ignacio Alonso, están muy preocupados por el rendimiento de la selección y por primera vez se replantean la continuidad del DT argentino.
El plan de Bielsa, que tanto ilusionó a los uruguayos con seis triunfos en sus primeros ocho partidos dirigidos, se fue desflecando con el tiempo
El equipo logró clasificarse al Mundial de Canadá, Estados Unidos y México 2026 y el objetivo quedó cumplido. Pero el camino recorrido terminó con más dudas que certezas.
Lo que el equipo ofreció el sábado en el empate 0-0 ante México, siendo completamente dominado de principio a fin, y el martes siendo arrollado por el equipo alternativo de Estados Unidos, es el fiel reflejo de lo que es Uruguay actualmente, Un equipo sin convicción para ejecutar la idea de su entrenador, despojado de confianza, inofensivo para sus rivales y ahora, frágil defensivamente.
El entrenador tiene mucho que ver con este panorama sombrío. Pero los que ejecutan el plan en cancha son los jugadores. Y ahí hay también grandes responsabilidades de varias figuras de peso.
Basta con repasar lo que fueron los rendimientos contra Estados Unidos.
Cristopher Fiermarín, quien pelea con Franco Israel el puesto de tercer golero, falló ante Estados Unidos.
Tomó un gol de tiro libre en su palo (con complicidad de defensores que no bloquearon el tiro ni referenciaron al jugador que distrajo al meta al buscar (habilitado) la pelota sobre el segundo palo.
Estuvo bien con el juego de pies, pero dejó enormes dudas cuando le tiraron centros. No mostró decisión para salir y cuando lo hizo, en el quinto gol, calculó muy mal y quedó pagando.
Nahitan Nández jugó uno de sus peores partidos con la selección. Perdió una pelota dividida en acción que derivó en el segundo gol. Perdió la referencia de marca del tercero donde le ganaron la espalda cuando Ronald Araujo salió a cubrir su sector. Y además aportó poco y nada en ataque.
Lo de Ronald Araujo también da para preocuparse. La forma en que lo pasaron en el segundo gol nada tiene que ver con su habitual fortaleza defensiva. Se vio desbordado.
Mathías Olivera, el mejor jugador de duelos defensivos que tiene Uruguay, tampoco dio pie en bola en defensa.
Matías Viña se salvó del desastre generalizado y tuvo el mérito de hacer un buen aporte en la jugada del gol uruguayo.
Rodrigo Bentancur, el líder futbolístico de esta selección por su visión de juego, su despliegue y su capacidad de jugar y hacer jugar, tuvo una doble fecha muy mala y ante Estados Unidos terminó expulsado, con dos violentas patadas en 14 minutos.
Manuel Ugarte, tal vez el mejor jugador de Bielsa en las Eliminatorias, jugó un pésimo partido ante Estados Unidos dejándolo claro en el segundo gol donde un zaguero lo eludió fácilmente.
Rodrigo Zalazar jugó fuera de puesto. Federico Viñas y Rodrigo Aguirre fueron absorbidos por los marcadores rivales y Giorgian De Arrascaeta fue el único que se salvó de la pésima imagen que dio el equipo.