El extremo de Peñarol, Diego García vive días de una tensión tremenda, debatiéndose entre la euforia de la cancha y la severidad del tribunal. Su presente es el de un jugador clave en el andamiaje del técnico Diego Aguirre y este domingo, fue autor de un golazo fundamental que desató la épica remontada ante Liverpool en la semifinal de la Liga AUF Uruguaya.
Sin embargo, su futuro se define en la sala de audiencias de La Plata, Argentina, donde el próximo martes 25 de noviembre recibirá la sentencia en el juicio oral por el delito que se le imputa de "abuso sexual con acceso carnal".
Esta doble realidad crea una dicotomía sin precedentes: Diego García celebra en la cancha mientras su libertad pende del veredicto que puede enviarlo a la cárcel por un delito que, en caso de condena, arrastra una pena de cumplimiento efectivo de entre seis y 15 años.
El martes 25: la cima y el abismo
La inminencia de la sentencia llega tras una intensa fase de alegatos. El fiscal Lucas Domsky solicitó una dura pena de ocho años de prisión, afirmando que el hecho se dio en un "contexto de violencia de género" y que la víctima "no dio su consentimiento" para la penetración vaginal, la cual se ejecutó "contra su voluntad". Domsky remarcó la afectación a la libertad sexual de la denunciante y el daño físico y psicológico que la llevó incluso a mudarse de ciudad.
En la misma línea de máxima severidad, la querella, representada por el abogado Marcelo Peña (letrado de la víctima, Clara), elevó la solicitud a 10 años de cárcel. Ambas partes pidieron que, de ser hallado culpable, se ordene la detención inmediata del futbolista para evitar el riesgo de fuga. Frente a ello, el abogado defensor de Diego García, Diego Bandín, reiteró su pedido de absolución para el jugador.
El contraste de las últimas horas: goles y actitudes
El contraste entre el drama judicial y el rendimiento deportivo es total. El pasado domingo, apenas a días de conocerse la sentencia, Diego García anotó el transitorio 1-1 con un verdadero golazo en un momento muy complicado para el equipo de Diego Aguirre en el alargue, que encarriló la victoria de Peñarol ante Liverpool, permitiendo al conjunto carbonero llegar a las finales de la Liga AUF Uruguaya.
Este desempeño en la cancha se da bajo la autorización del juez de la causa, que le permitió viajar para reincorporarse a las prácticas por solicitud del técnico Diego Aguirre.
Paradójicamente, la actitud de Diego García en el propio juicio fue lo que más sorprendió al abogado querellante, Marcelo Peña. Tras varias negativas a declarar, el futbolista habló en el último día del juicio, mostrando una "soltura" y una actitud "liviana". Lo más llamativo fue que, en sus últimas palabras, García agradeciera a los clubes que le permitieron "seguir jugando" tras ser denunciado, una actitud que, según Peña, demostró que "nunca le interesó seguir el tema", algo que no esperaría en un caso de denuncia falsa.
Los tres escenarios ante el fallo judicial
El juez deberá explicar su resolución en la audiencia del 25 de noviembre, abriendo tres caminos definidos para el futuro del futbolista Diego García, tal como informó el pasado viernes Referí.
Obviamente que si es absuelto, podrá regresar de inmediato a Uruguay.
1. Condena apelable: libre del club, no de la Pena
El escenario más probable, según el abogado de la víctima. Implica una condena con pena de cumplimiento efectivo (como la solicitada de ocho o 10años), pero sin detención inmediata. Al ser una condena apelable, el futbolista seguiría como condenado, pero podría regresar a Uruguay, con la certeza de que la pena se efectivizará en un plazo que Peña estima en "tres o cuatro años". La consecuencia más inmediata en este caso sería su situación contractual: de ser condenado, Diego García quedará libre de Peñarol.
2 y 3. Condena con restricción o Detención
Existen dos variables en el escenario condenatorio más severo:
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Restricción de salida: El futbolista es condenado, queda con prohibición de salir de Argentina y debe permanecer en el país bajo medidas de control hasta que la sentencia quede firme.
Detención inmediata: El juez acoge la solicitud de la Fiscalía y la querella, dictando la condena y ordenando la detención de Diego García en el propio juzgado de La Plata. Este sería el inicio de la prisión efectiva.
La sentencia del 25 de noviembre no solo sellará el destino individual de Diego García, sino que también establecerá un precedente crucial en la respuesta del fútbol ante las graves denuncias de violencia de género que han salpicado a sus figuras.
No obstante, en la cancha, este domingo Diego García fue determinante. Ingresó a los 85 minutos por Maximiliano Silvera para los últimos minutos del partido y de haber alargue, tratar de cambiar lo poco que mostraba Peñarol. Enseguida en el inicio del alargue, Liverpool se puso en ventaja con un gol de Abel Hernández de cabeza. Y en el momento que más quemaba llevar la pelota a los aurinegros y que más desorientados estaban en la cancha, un golazo de Diego García empató el encuentro y encaminó la victoria para alcanzar las finales clásicas ante Nacional.